¿Qué ha pasado con la gripe A?

Cuidado con la peligrosísima pandemia que se nos acercaba desde este verano, recuerdo cuando comenzó en México, escuelas cerradas y gente con mascarillas, y se pronosticaban yo no sé cuantas muertes. Qué forma de alarmar a la gente, pobres hipocondríacos, habrá habido personas que se hayan hecho con un verdadero arsenal de productos para prevenir. Recuerdo cuando empezamos a escuchar datos y ver noticias de las primeras victimas en la televisión, sentía verdadero temor a que llegara este invierno y empezaran mis hijas en el instituto.

Pues si, que pedazo de pandemia, en casa hemos pasado la gripe y nos ha durado dos días como mucho, y si miras las estadísticas, la gripe común deja más victimas que la del virus H1N1 (Gripe A), así que solo me resta plantearme unas preguntas, ¿Por qué tanto revuelo? ¿Por qué alarmarnos de esa forma tan exagerada? Y después de indagar un poco llego a la conclusión, de que como siempre, está el dinero detrás de todo esto y que las multinacionales farmacéuticas probablemente han sido las que han promovido esta historia para no dormir. Consultando en distintas fuentes me encuentro que quien lanzó la noticia al mundo fue la OMS bajo la influencia de personajes tan destacados como el presidente de Gilead Scienses Inc. El señor Donald Rumsfeld, ex ministro de defensa de Bush y accionista mayoritario de dicha compañía y que fue el que lanzó las alarmas contra una simple gripe, que dicha compañía tiene la patente del famoso Tamiflú y que esa patente fue comprada por Roche, el potente laboratorio europeo.

Además, me entero también de que la base del Tamiflú es el anís estrellado y que Roche es propietario del noventa por ciento de la producción mundial del mismo. ¿Es un negocio redondo o no? Juegan con nosotros como les da la gana, para llenarse los bolsillos a costa de nuestro miedo; ¿y la vacunas? ¿Qué pensáis de ellas?

Cuando le preguntas a tu médico de cabecera que hacer, si ponértela o no, su "ética" profesional no le deja, más que ofrecerte un panfleto con las recomendaciones de la Seguridad Social, pero que cuando le preguntas si ellos se la pondrían te dicen por la bajito que no, que ellos no se la han puesto. Así que vamos a tener que abrir bien nuestros ojos a todo lo que nos rodea, porque nada es verdad ni mentira, sólo depende de quién se quiera forrar a nuestra costa, a costa de nuestro miedo. Y el miedo, según André Maurois, es el más peligroso de los sentimientos colectivos.

fuente: lavanguardia.es